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El mundo ha cambiando tanto, pero tanto... 

Brazos abiertos, a lo...

 ‘La  guacherna gay’, para

recibir turismo LGBTI

Desde que en 2010 se legalizó el matrimonio entre personas de mismo sexo, Buenos Aires se ha convertido en un importante polo de turismo gay. Además de toda la oferta recreativa que siempre ha caracterizado la ciudad porteña, se le suman la cada vez más numerosa lista de restaurantes, bares, discotecas y clubes destinados al público gay. Pasear por el barrio de Palermo es respirar oxígeno gayfriendly. (http://la.eonline.com/)

Considerada capital del turismo gay en América del Sur, Rio de Janeiro es un destino lleno de emoción y diversión para la comunidad homosexual de todo el mundo. El colorido, ritmo y desenfreno que caracteriza la capital carioca y su gente conforma un ambiente desprejuiciado, donde reinan la liberación, distensión y respeto, tanto en los sitios integrantes de la guía gay de Rio de Janeiro como en todos los sitios turísticos de la ciudad. Rio de Janeiro se destaca, precisamente, por la ausencia de límites marcados entre zonas homosexuales y heterosexuales: turistas y cariocas, cualquiera sea su preferencia sexual, conviven mayoritariamente en armonía y libertad. (http://www.viajeabrasil.com/)

Fachadas de Le Petit bar gay en Cartagena y el Hotel Gay San Sebastián, Bogotá. De este, un usario dice que “es pequeño, pero tiene todo lo necesario para una muy buena estadía. El plan Love el cual usamos con mi pareja fue excelente y muy romántico, colmó totalmente las expectativas…”

Por Inocencio De la Cruz

Certero, el espaldarazo dado por el Estado colombiano —a lo me-

jor sin haberlo presupuestado o, de pronto, algunos por ahí ‘sin querer queriendo’— a una actividad turística que ha irrumpido lucrativa en el panorama económico nacional: el turismo LGBTI.

Un espaldarazo muy literal, no hay duda: se ha admitido como igual

a un grupo numeroso que era visto y tratado como ‘bicho raro’: el colectivo lesbianas-gais-bisexuales-transgéneros-intersexuales: LGBTI. Con iguales derechos, en toda la condición de humanos, que un macho o una hembra, que un hombre o una mujer colombianos.

La legalidad y constitucionalidad de derechos como matrimonio igua-

litario, adopción por parte de personas del mismo sexo y pensión de sobre-vivientes de parejas gay —entre otras prerrogativas—, más la apertura de hoteles LGBTI y la implementación de paquetes turísticos con ese objetivo, hacen hoy día de Colombia el mejor destino turístico gay del mundo para este 2017 que ya está que quema el primer mes.Y no se trata de un ‘sanbe-nito’ promocional o un pregón exhibicionista de la comunidad LGBTI sino de un premio ganado en la Feria Internacional de Turismo, Fitur, congregada en Madrid, España, y que, necesariamente, obliga a los colombianos a abrir sus brazos a una actividad económica que es dinamizada, en un elevado

porcentaje, por gente de estratos altos. Que gasta sin miramientos.

Colombia es el mejor destino turístico LGBTI del momento en el mundo —lo ratifica el premio Diversity

Consulting International en la categoría destino que le otorgó Fitur— y ‘La guacherna gay’ en el marco del Car-naval de Barranquilla es uno de los destinos-atractivo más próximos para el desarrollo de una actividad econó-mica que genera grandes divisas. Solamente en 2015 este certamen anual congregó en torno a su desarrollo

a más de 250.000 espectadores.

De acuerdo con la Organización

de Naciones Unidas, ONU, el diez por ciento de la población mundial pertenece al colectivo LGBTI y, de acuerdo con cifras de las entidades de gobierno encargadas de este ren-glón de la economía, en 2015 Colom-bia fue visitada por 4.447.004 extran-jeros de quienes, de acuerdo con los cálculos de la ONU, entre 350.000 y 400.000 son LGBTI.          

Gracias al premio ganado en

Fitur, Colombia se suma al listado de países de los dos lados del globo te-rráqueo que —en número de 12—

han sobresalido como destino turístico gay, dos de ellos latinoamericanos: Argentina, Brasil, Alemania, Aus-tralia, Canadá, España, Estados Unidos, Francia, Grecia, Israel, Países Bajos y Reino Unido. Y ahora Colom-bia, el número 13.

En nuestro territorio —con una agenda festiva sin parangones en el mundo—, además de ‘La guacherna

gay’ próxima, Bogotá, Cartagena, Barranquilla, Medellín, Cali, Bucaramanga y Pereira han de ser vistas como ciudades oferentes de atención esmerada para los LGBTI, pero en especial el Distrito Capital que cuenta con una política pública favorable a este colectivo y brinda hospitalidad en 85 establecimientos, entre los que se

cuenta Theatron, la discoteca gay más grande de Colombia y entre las más grandes en América Latina.

OTRO MUNDO

El mundo ha cambiado tanto,

pero tanto-tanto, que hoy se puede mirar como ‘Otro mundo’: el turismo gay ya es una práctica normal en Eu-ropa y en algunos países de Latinoa-mérica y Norteamérica.

Esta industria cuenta con la Aso-

ciación Internacional de Turismo Gay y Lésbico: International Gay & Les-bian Travel Association, IGLTA, una red internacional dedicada a poner en contacto a turistas homosexuales de todo el mundo.

De acuerdo con viajejet.com,

el propósito de IGLTA es fomentar la adquisición de buenas prácticas a la hora de elegir los viajes LGBTI, tanto para turistas como para empresas que ofrezcan viajes organizados, pa-quetes turísticos, etc.

La industria del turismo gay a-

barca varias posibilidades a la hora de viajar, tanto en el país de origen o en el extranjero: cruceros, hoteles,

balnearios, spas y saunas, bares y restaurantes, locales (pubs, clubes nocturnos, etc.), escapadas de fin de semana y playas

La oferta turística varía en función de si se viaja en pareja o en solitarios disfrutando de soltería. Existen

numerosas ofertas en las principales ciudades gay-friendly del mundo, así como hoteles románticos, con o sin

jacuzzi, destinados a pasar las vacacio-nes en pareja.

Un dato importante: viajar para acudir

al desfile del orgullo gay en las principales capitales mundiales es una opción muy demandada entre este tipo de público por-que las diversas celebraciones son autén-ticos espectáculos multicolor en Madrid, Estados Unidos, Ámsterdam, Londres, Ar-gentina, Alemania e Israel, entre otros, los países más gay-friendly en la actualidad.

En Latinoamérica Brasil, México, Uru-

guay y Argentina, el turismo LGBTI es po-lítica de Estado que no solo lo protege si-no que lo proyecta. Pero vistos como destinos turísticos gay se han consolidado Argentina y Brasil.

ARGENTINA

Argentina debe su condición de destino gay-driendly muy atractivo para el colectivo LGBTI, debido principalmente a las diversas políticas oficiales de inclusión que han entrado en vigor. Su capital, Buenos Aires, tiene una oferta turística para público homosexual. Aparte

de la celebración del Día Internacional del Orgullo LGBTI durante el mes de noviembre se celebran otros dos grandes certámenes: la Marcha del Orgullo Gay y el Festival de Tango Queer. Pero el que más atrae es la Fiesta de la Vendimia Gay en Mendoza, que se celebra marzo.

BRASIL

En Brasil, el turismo gay está muy

presente en São Paulo. El hecho de ser la ciudad más grande de Sudamé-rica hace que posea un espíritu cosmo-polita y abierto a la diversidad tanto ét-nica como cultural y sexual. Junto a

Río de Janeiro, San Pablo es una de las capitales principales para la comu-nidad LGBTI en Brasil.

Los festivales del Orgullo Gay de 

São Paulo están señalados como los más multitudinarios del mundo y en ellos reina siempre un ambiente festivo de libertad sexual.

Existen, además, una serie de

puntos de encuentro gay, tales como

Jardins, ubicado en el área más rica y sofisticada de la ciudad. Dentro de esta área destacan la Avenida Paulista y la Rua Oscar Freire, donde se encuentran las tiendas de moda más caras y exclu-sivas.

Río de Janeiro, por su parte, está

considerada como la capital del turismo homosexual de América del Sur. Las gentes de Río llaman la atención por su actitud desenfrenada y liberal.Si existe una zona por excelencia donde reine el turismo gay esa

es Ipanema, zona en la que se encuentran la mayoría de playas, cines, teatros, bares, etc. dedicados exclusiva-mente a la comunidad LGBTI.

COLOMBIA

Rotos ya, con acciones legislativas y constitucionales, mitos y paradigmas, entendido el hecho de que la gene-

ración de valor económico nunca es ajena a la generación de valor social —y que la comunidad LGBTI se da me-diante la inclusión—, Colombia ha de abrir sus brazos al turismo LGTBI, cuya dinámica corre principalmente por gente de estrato alto y así lo han entendido empresas como Aviatur, con su línea de negocio GayTravel; la cadena de Hoteles Marriott, pionera en certificarse con el sello FriendlyBiz de la Cámara de Comerciantes LGBT Colombia; los hoteles boutique Le Petite en Cartagena y San Sebastián en Bogotá; las excursiones gay de The Gallery Travel, Odretours y Duo Travel de Viajes Chapinero; junto con las campañas de aerolíneas como Delta y VivaColombia.

Una muestra de ‘La guacherna gay’ en el Carnaval de Barranquilla del 2016. Congregó a 250 mil espectadores.Una muestra de ‘La guacherna gay’ en el Carnaval de Barranquilla del 2016. Congregó a 250 mil espectadores.

Foto zonaceroo.com

En el barrio Chapinero de Bogotá, Theatron, la disco-teca más grande de Colom-bia y una de las mayores de América del Sur. El local tie-ne capacidad para 5.000 per-sonas y 10 ambientes con distintos géneros musicales. La discoteca cuenta con ba-rra libre. El ambiente es abierto y gay friendly. Vier-nes y sábados de 9:00 pm a 3:00 am.

“¡Guácala!”, diría más de uno pensando a la antigua. Y nada qué hacer, porque a la moderna, en numerosos países el mundo, entre ellos Colombia, el matrimonio igualitario es un derecho garantizado por la ley y la constitución.

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