El Muelle
CARIBE
Homenaje perenne al Muelle de Puerto Colombia
Crónicas y Opinión
José Orellano, director
De vieja data, pero preciso: Cuando se quiere... ¡se puede...!
No pueden creerles, tan
ingenuamente, a quienes
deforman lo acordado…
De Patricia Lara Salive
Con un tío y una prima hermana secues-
trados y asesinados y con otros dos primos hermanos secuestrados y con un primo segundo secuestrado también, Patricia Lara Salive debió cargar durante años el peso trágico de ser Lara.
La presentadora de la sección ‘1,2,3’ de
CM&, Adriana Tono, hizo la anterior presentación
y leyó —emisión del jueves 25 de agosto— un texto de la periodista y escritora, indiscutible víctima del conflicto armado que se acerca a su fin definitivo.
Precisamente uno de los victimarios de
Lara Salive, el ELN, se resiste a activar los diálogos de paz con el gobierno nacional, mientras el presidente de Ecuador Rafael Correa agiliza su papel de facilitador en procura de que pronto cristalicen los acercamientos. Dice Patricia:
“Por favor lean los acuerdos de Paz, son
doscientas y pico de páginas. Léanlas todas, a conciencia, una y otra vez. No pueden creerles, así como así, tan ingenuamente a quienes deforman lo acordado, a tantos mentirosos con rabo de paja que le temen a la paz porque ellos también podrían ser juzgados por financiar y ser cómplices de paramilitares y porque sus inmen-sas tierras tendrían que empezar a pagar im-puestos como lo hacemos todos los ciudadanos de bien.
No crean en el cuento chimbo y absurdo
del peligro del Castro-Chavismo.
Lean por favor y relean las doscientas y
pico de páginas de los acuerdos, analícenlas ustedes mismos con sus consciencias y piensen en los ocho millones de colombianos víctimas de la guerra, entre las cuales me encuentro yo… Yo, que además he vivido amenazada desde los 14 años por todos, desde delincuentes comunes, ELN, militares y paramilitares.
He estado en tres listas de amenazados a
muerte, entre los cuales estaban Jaime Garzón, Jaime Pardo Leal, Leonardo Posada, Héctor Abad Gómez, todos asesinados… Yo que he tenido que escribir entre las balas y morir de miedo ente el ladrido de los perros en las noches de refugio, porque podrían estar anunciándome la llegada de la guerra… Yo que he perdido a diecisiete de mis amigos, muertos a tiros como Rodrigo Lara, como Galán, como Pizarro, les pido que lean los acuerdos de La Habana y, a conciencia, voten.
No voten impulsados por las mentiras,
yo voy a votar SÍ, y los invito a que ustedes también voten por la paz, no hay más opciones: la paz imperfecta —como preguntaban ayer en CM&: el director Yamid Amat entrevistaba el miércoles 24 al expresidente Cesar Gaviria— o la guerra.
Hagamos un país normal donde se pueda
vivir, trabajar, prosperar y amar en paz.
Yo voy a votar SÍ
¡Un nuevo país!
En paz y... ¿con justicia justa?
Por Inocencio De a Cruz
En este 2016, ¡histórico miércoles 24 de
agosto para Colombia!
Uno. Concluyeron en La Habana las nego-
ciaciones de paz entre el gobierno nacional y las Farc con firma del acuerdo final para que, en posterior anuncio presidencial, este lunes 19 se dé inicio en Colombia al cese bilateral al fuego.
Dos. Acción reivindicativa del Congreso
de la República, actuando como órgano instructor, al suspender de su cargo —el acto final tenía que escenificarse en plenaria del Senado—, al magistrado de la Corte Constitucional, el cordobés Jorge Pretelt, sindicado de concusión. Cumplido todo el trámite —el proceso tenía que pasar por Cámara y Senado, comisiones de Acusación y de Instrucción— y otorgadas las garantía al debido proceso: el suspendido había de hablar ante la plenaria de 102 senadores, 55 ‘padres de la patria’ votaron a favor y 5 en contra —60 hacían quórum decisorio—, al tiempo que el Centro Democrático se retiraba de la sesión y hacía más evidente su inclinación e identificación con actuaciones non sanctas, concretamente de sus militantes.
Los cinco NO, los que votaron en contra
de la suspensión del magistrado —quien podría ser declarado ‘indigno’ y perder sus derechos políticos— y no deseaban que tan aberrante caso llegara la Corte Suprema de Justicia, cinco que no son del CD, se identifican como Miguel Amín y Sandra Villadiego, de la U; Antonio Guerra y Juan Carlos Restrepo, de Cambio Radical, y Nora García, del Partido Conservador.
Tras lo actuado, en el Senado, presidido
por Mauricio Lizcano, sigue el proceso contra Pretelt, un juicio disciplinario que podría decla-rarlo ‘indigno’ y condenarlo a la pérdida de sus derechos políticos.
No hay duda: esta ha sido una acción reivin-
dicativa del Congreso —su imagen y la aproba-ción a su actuación siempre rueda por el suelo— ante el constituyente primario, el pueblo, su
elector. La decisión es histórica: el Congreso, como institución, vuelve, 57 años, 11 meses y 15 días después, a acusar a un funcionario con fuero: el 29 de septiembre de 1958 lo había hecho con el general Gustavo Rojas Pinilla y este 24 de agosto de 2016 lo hizo con quien no solo era uno de los magistrados ‘más respetados en el país’, sino que había llegado a presidir el alto tribunal.
Mauricio Lizcano,
presididente del
Senado
¡FIN DE LA GUERRA!
Uno. Después de más de medio siglo de
guerra con las Farc, “un nuevo día amanece en Colombia”, como dijo la candidata a la presidencia de los Estados Unidos, Hillary Clinton refiriéndose a lo acordado. Y en efecto, a partir de este lunes, de acuerdo con lo acordado, Co-lombia es un nuevo país: terminan definitiva-mente las acciones militares y toda hostilidad entre la fuerza pública y los ‘farianos’, mientras el presidente de Ecuador Rafael Correa sigue mediando para que pronto haya diálogos con el ELN.
El que se ha logrado dar es un paso contun-
dente que echa a andar a Colombia por senderos de paz y pone fin a la existencia de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia que surgieron como grupo campesino alzado en armas tras la toma-recuperación por parte del Estado de Marquetalia, el 14 de junio de 1962. Al poco tiempo el grupo se autoproclamó ‘marxista-leninista’ y desde entonces ha sembrado terror y provocado ríos de sangre durante 54 años, dos
meses y diez días.
Hoy, tras la decisión del presidente Juan
Manuel Santos de cambiar la estrategia de la guerra —que tuvo vigencia hasta el gobierno de Álvaro Uribe— ha triunfado el diálogo con un grupo que nació ante la ausencia de Estado.
A Colombia le ha llegado el tiempo “de mostrar que la política es una herramienta superior a la de la guerra para solucionar los conflictos en grandes intereses”, dice Telesur, para rematar que el silencia-miento de los fusiles también implica que se pondrá fin a la costumbre de ejercer la violencia como un medio para hacer lucha política”.
De tal forma, pues, el Estado debe asumir frente a la nación el reconocimiento de su participación
en la creación del paramilitarismo y la permisividad con sus estructuras, propiciando un clima en el que
la violencia política y las continuas violaciones de los derechos humanos eran cuestión cotidiana.
El acuerdo que, de acuerdo con los fir-
mantes, beneficia, protege y fortalece los derechos de todos los colombianos, responde a todas las dimensiones del conflicto y, por eso —dijo el presidente Santos—, “nos permite cerrar el capítulo de la guerra con las Farc y empezar a escribir el nuevo capítulo de la paz”.
Los seis puntos sustanciales de “lo acor-
dado, porque ya todo está acordado”, son, en su esencia, los siguientes:
1 Reforma Rural Integral.
2 Participación política: Apertura demo-
crática para construir la paz.
3 Cese al Fuego y de Hostilidades Bila-
teral y Definitivo y la Dejación de las Armas.
4 Solución al Problema de las Drogas
Ilícitas
5 Víctimas.
6 Mecanismos de implementación y veri-
ficación.
La meta, al alcance de todos, es el fin
efectivo de la violencia, la protección a los derechos de las víctimas, la vuelta de los ojos estatales a los campos con oportunidades y progreso, la garantía de reincorporación a la vida civil y legal de Colombia a los alzados en armas que se desmovilizan y el combate efectivo contra el narcotráfico, que terminó siendo alimento del conflicto durante muchos años…
La lectura completa del ACUERDO
FINAL PARA LA TERMINACIÓN DEL CONFLICTO Y LA CONSTRUCCIÓN DE UNA PAZ ESTABLE Y DURADERA —la re- comendación de la periodista y escritora Patricia Lara Salive— en el siguiente link:
Dos. El togado suspendido deberá ahora esperar
que la Corte Suprema de Justicia abra el juicio penal formal en su contra, que son varios los procesos que enfrenta Pretelt: Por despojo de tierras… Por tráfico de influencia… Otro que tiene que ver con un presunto favorecimiento al grupo Mira: se asegura que Pretelt recibió 10 mil millones de pesos por favorecer con su voto a este Movimiento y que intercedió ante distintos fiscales para favorecer a la pastora María Luisa Piraquive, investigada por delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito… Además, la acusación que en una diligencia de versión libre solicitada por el exjefe político del ‘bloque Central Bolívar’, alias ‘Ernesto Báez’, éste aseguró que Pretelt tenía una “estrecha relación” con Vicente Castaño Gil. Precisó que a principios de 2005 él vio a Pretelt reunirse varias veces con los jefes de las AUC. De no ser verdad, Báez se expone a volver a la cárcel por falso testimonio.
Al llegar a la Corte Suprema
Visto ya como ‘indigno’, el exmagistrado Jorge Pretelt debe afrontar juicio disciplinario en el Senado y penal en la Corte Suprema.
El Presidente Santos y su esposa María Clemencia Rodríguez junto a niños y niñas que sueñan un país sin guerra, retratados en la ‘selfie de la paz’. El jueves 14 Santos anunció el cese bilateral del fuego a partir de este lunes y la realización del plebiscito, el próximo 2 de octubre, día del nacimiento de Gandhi, “un día muy especial”. Anuncios hechos tras hacer entrega a los presidentes del Senado Mauricio Lizcano y de la Cámara de Representantes Manuel Ángel Pinto tanto de la carta por medio de la cual informa sobre la fecha para la refrendación de los acuerdos —o el SI por la paz— como los textos de esos acuerdos, los definitivos, logrados en La Habana. La entrega obedeció a un acto establecido por la ley. Después, en la clausura de la Cumbre de Gobernadores en Bucaramanga, Santos invitó a los gobernadores a adelantar una intensa pedagogía de la paz en sus regiones, para que el país entienda los alcances del acuerdo al que el Gobierno llegó con la guerrilla de las Farc.
El fin del final en La Habana: el Jefe del Equipo Negociador del Gobierno Humberto de la Calle y el Alto Comisionado para la Paz Sergio Jaramillo en compañía de los demás integrantes del Equipo Negociador, anuncian en rueda de prensa, tras el acuerdo, que el Estado queda a la espera de la liberación de niños de las filas de las FARC para darles atención por medio de un programa especial. “Está claro que todos los niños deben salir de filas, tienen que ser liberados en su totalidad. Y esa es una decisión de las partes respecto de la cual no hay duda”, subrayó De la calle.
Foto: Omar Nieto - Alto Comisionado para la Paz - SIG
Foto:César Carrión - SIG